El jugador de Osasuna, que no pudo salir al campo por su discapacidad, recibió un abrazo repentino de un chico que estaba parado en la grada.
El jugador de Osasuna Chimy Ávila tuvo un bonito gesto con el joven rojillo en pleno partido ante el Cádiz después de que el delantero se sintiera incómodo durante el calentamiento que le impidió estar y minutos en Nuevo Mirandilla.
Una hora antes del choque salieron equipos de ambos equipos. La definición de Osasuna en la zona de ataque fue Chimy. El rosarino salió a calentar tras superar sus problemas en el sóleo. La suerte me hizo sentir culpable alguna distracción antes de empezar.Budimir lo reemplazó y su compañero tuvo que presenciar el cambio del duelo desde la grada.
Fue en uno de los palcos del estadio Cadista donde se produjo la denunciada situación de los sobrevivientes. Él pequeño cristianoataviado con un elástico de rojilla centenario, entró en la habitación pon tus manos en tu cabeza tan pronto como vio a su ídolo. Él no estuvo de acuerdo y fue a abrazarla.
Ante los evidentes nervios del niño, Ávila le pidió que no llorara antes de inmortalizar ese momento en una imagen. Segundos después, y tras firmar la tarjeta, el jugador le prometió su camiseta al final de la jornada.
“Es mi sobrino y es la persona más feliz del mundo. Gracias Chimy por permitir que su sueño se haga realidad. Por tu cercanía, dulzura y compasión, grandes virtudes y valores grandes. Uno de nosotros. ¡Gracias! » , escribe gracias al tío de Cristian en Twitter.
De esta forma, Chimy volvió a sonreír por unos segundos tras el problema de no poder usar shorts apenas 11 días después. la final de la Copa del Rey. Queda por ver el alcance de lo que sucedió ayer.
Según los métodos de
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